Descarbonización del transporte europeo

Europa necesita un marco legislativo abierto que pueda evaluar en términos justos todas las soluciones que contribuyen a la descarbonización del sector del transporte y al logro de los objetivos de calidad del aire. Para alcanzar los objetivos de 2030, actualmente en discusión, las tecnologías de motores y vehículos, combinadas con combustibles gaseosos renovables y de bajo contenido de carbono, tendrán que desempeñar un rol clave en el sector del transporte pesado. Pero la actual metodología de emisiones de CO2 de tubo de escape debe ser complementada y considerar la contribución del biogás avanzado y renovable.

El GNC y el GNL son tecnologías maduras, accesibles, confiables, seguras y están listas para desempeñar un papel en la transición hacia un sistema de transporte limpio y sostenible. El gas natural renovable también es una solución de combustible disponible hoy que está lista para desempeñar su papel. La producción de biometano ya es una práctica estándar, y su disponibilidad y flota de vehículos está creciendo rápidamente. Por eso, justo antes de la votación final del Parlamento Europeo sobre el reglamento que establece la norma de emisiones de CO2 para vehículos pesados nuevos, NGVA Europe y NGV Italy instan a la inclusión de un nuevo enfoque complementario.

Se espera que el sector del transporte pesado desempeñe un papel cada vez más importante en la economía global, mientras que el transporte público y los autobuses tendrán que complementar cada vez más la movilidad privada para garantizar un mayor estándar en la calidad del aire.

La combinación bien establecida entre motores convencionales y combustibles derivados del petróleo evolucionará progresivamente hacia nuevas soluciones. Tendrá que apoyarse en combustibles limpios y renovables como el bio-GNC y el bio-GNL para iniciar hoy el proceso de descarbonización, utilizando soluciones técnicas adecuadas según las diferentes necesidades de transporte. Las tecnologías de GNC y GNL pueden cubrirlas todas, desde la movilidad urbana hasta el transporte de carga de larga distancia. Además, el gas renovable se puede mezclar con el gas natural sin costo adicional o pérdida de rendimiento.



El uso de gas natural y renovable representa oportunidades ambientales y de mercado:

▪ Sobre la base “well-to-wheel”, el bio-GNC y bio-GNL brindan una reducción general de CO2 del 80% al 95% (en comparación con combustibles convencionales) cuando se usa gas renovable generado por desechos municipales o gas sintético, respectivamente.
▪ Cuando se produce biometano a partir de estiércol líquido húmedo, la reducción de CO2 puede incluso aumentar hasta un 180% (en comparación con combustibles convencionales). Esto es cuando en el proceso el metano que debe ser liberado a la atmósfera es capturado y convertido.
▪ Las emisiones reales al manejar con combustibles limpios, como el gas natural, son más fáciles de controlar: se garantizan niveles de emisión muy bajos con sistemas de postratamiento de gases simples y confiables.
▪ Los vehículos a gas pueden proporcionar una reducción de ruido de hasta el 50% en comparación con los diesel.
▪ Las operaciones de almacenamiento y repostaje son comparables a los combustibles convencionales: los camiones a GNL del mercado pueden garantizar una autonomía de más de 1.600 km con características de par y potencia equivalentes al diesel.

NGVA Europe y NGV Italy continuarán solicitando la inclusión temprana de una metodología que pueda traducir la neutralidad tecnológica en legislación. El gas natural renovable está listo para desempeñar un papel fundamental para apoyar el proceso de descarbonización del transporte pesado.

Por Pablo Mccarthy
Fuente: NGVA Europe/NGV Italy