Pórpora, 70 años de trayectoria en el Mercado

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En el marco del 70° aniversario de la Empresa, Abel Pórpora realizó un recorrido por su historia y analizó la actualidad del sector autopartista.

TA: ¿Cómo fueron los orígenes de la Empresa?

AP: La Empresa nace en 1951 fundada por mi padre, que incorporó a su hermano, primero como empleado y luego como socio. En ese momento comenzaron con un taller, era una época de mucho faltante de productos. El comienzo no fue con línea pesada sino con el Mercedes-Benz 170. La necesidad hizo que un amigo de mi papá se acercara a quien era presidente honorario de Mercedes-Benz, Juan Manuel Fangio con lo que surgió la posibilidad de producir algunas piezas que estaban en falta. Así comenzaron, muy de a poco y de forma artesanal. Con el tiempo nos fuimos especializando en determinadas líneas como proveedores del mercado de reposición, al principio sobre todo con línea liviana y luego enfocándonos en camiones, ómnibus y agro.

TA: Luego se incorporan ustedes como segunda generación. ¿Cómo se dio ese proceso?

AP: Yo me incorporé en 1985 y luego se fueron sumando mi hermano menor, Mauricio, y mi hermana mayor, Cecilia. Hoy seguimos unidos, como socios con distintas tareas a coordinar: el área administrativa, industrial y, en mi caso, comercial. Hoy ya está trabajando con nosotros la tercera generación de la familia a través de mis sobrinos.

TA: ¿En qué etapa se encuentra hoy la Empresa?

AP: Hoy estamos en una etapa de reconversión industrial, adaptando nuevas tecnologías, incorporando sistemas de control de producción. Estamos trabajando mucho en eso y abriendo nuevas etapas de robotización. En el mundo se apunta a agilizar muchos procesos que permiten lograr mayor eficiencia y competitividad. Nosotros nunca dejamos de incorporar tecnología y estamos en vísperas del lanzamiento de la web totalmente renovada, siempre priorizando el contacto por todas las vías con el cliente y esperando poder volver a las visitas presenciales frecuentes.

TA: En este contexto, ¿cuáles son los proyectos de cara al futuro inmediato?

AP: Nosotros no podemos dejar de invertir, y hoy contamos con gente que nos ayuda en el área comercial; es importante analizar al cliente, escucharlo más y darle servicios en función de lo que requiere. La pandemia nos catapultó, aceleró algunos procesos, cambió la forma de comprar, y eso nos obliga a adaptarnos como vendedores. Algunas cosas, como las visitas, van a volver, porque el contacto cara a cara para algunas cosas es irremplazable; otras demostraron que pueden ser más eficientes de otra manera.

TA: La pandemia y el contacto a distancia permitió otro tipo de vínculo con algunos clientes, ¿qué fue lo que más lo sorprendió en ese sentido?

AP: Siempre el cliente está agradecido de que uno lo visite. Hoy, ante la limitación, lo que estamos haciendo es coordinar visitas esporádicas. Lo que notamos es que hay un interés por ese contacto, no sólo presencial. Yo lo que veo y hablo mucho con los colegas es que, dejando de lado cualquier situación de crisis, tenemos que estar permanentemente preparados, a veces “preparados para el pasado”, porque siempre terminamos volviendo. Pero eso también es ver las cosas virtuosas del pasado y, de las crisis, sacar las oportunidades. Hemos pasado crisis muy profundas y algunos la han pasado muy mal. Pero hay una realidad, cuando Argentina luego de la crisis se pone realmente de pie, las industrias y las empresas no dan abasto para atender la demanda creciente. Hoy considero que la oferta argentina no está preparada para crecer como podría hacerlo. El país no está preparado para una recuperación, las industrias no están invirtiendo lo suficiente y el país no tiene una apertura al mundo suficiente como para compensar esa demanda.

TA: ¿Cómo cree que tiene que ser el camino hacia la recuperación económica?

AP: Lo ideal es una recuperación lenta pero continua, acompañada en todo sentido por los empresarios, que al ver un horizonte mejor se animen a tomar más gente, a comprar máquinas, a buscar nuevos clientes. Esa recuperación paulatina nos dará tiempo a prepararnos, esperamos que esa activación sea fomentada desde el estado, pero sobre todo trabajada en las bases, para que el cambio no sea tan brusco, porque la demanda, sin oferta que la cubra, simplemente se llama inflación. Está pasando en el mundo y también acá y el motivo es ese, la demanda sobre la oferta.

TA: ¿Qué mensaje les daría a sus clientes que los acompañan en todos estos años?

AP: Más que un mensaje, lo que le puedo decir al cliente es gracias. Porque consideramos que estamos muy lejos de ser perfectos y sabemos que, si hay algo que no falta, son servicios de otros colegas, tanto nacionales como internacionales. Entonces les agradecemos a los que nos eligen, a los que prefieren nuestro producto, aún cuando están comprando a los demás y saben que lo nuestro es distinto. Eso a mí me deja sin palabras, porque lo que alguien podría usar para especular y subirle el precio, para nosotros significa algo muy importante. El mensaje es que sigan confiando en nosotros y la palabra es gracias. Gracias por acompañarnos, gracias por confiar en el equipo.

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