La Aerodinámica

Respecto al flujo de aire con que se encuentra el auto, el mismo puede dividirse en dos partes; el flujo interno y el externo. El externo es el factor principal de resistencia aerodinámica, e involucra al flujo que pasa por sobre la carrocería, y por debajo de la misma, entre el piso de la carrocería y el suelo. En estudios realizados, se le dá misma importancia a la resistencia del aire, que pasa por debajo como lo que pasa por arriba, o por alrededor de ella.

En lo que concierne al flujo interno, el mismo es el que circula por dentro del habitáculo del automóvil y a ventila, incluyendo al motor a los sistemas del motor. Este flujo es aproximadamente el 20 por ciento, de la resistencia aerodinámica, y algunos aspectos de funcionamiento del auto se ven condicionados por el mismo.

Es un aspecto importante, para el rendimiento del motor, y para el confort y la seguridad de los ocupantes.

Los parámetros a tener en cuenta, para el cálculo de la resistencia total al avance son los siguientes:

• La velocidad relativa del vehículo (con respecto al aire)
• La densidad del aire.
• Las dimensiones del automóvil
• La forma de la carrocería

Se puede decir, que la forma aerodinámica, no es más que una de las tantas condiciones o cualidades, que debe reunir un vehículo moderno. Entre otros aspectos de importancia, están también;

• La resistencia al aire de un vehículo; no depende solo de su forma, sino también de su superficie maestra (relación longitud/altura máxima).

Esta relación no puede ser reducida en forma definida ya que es necesario ubicar a los ocupantes y al equipajes. Por otra parte, una forma aerodinámica tiene también limitaciones concretas en el sentido de la longitud o el largo del automóvil.

• El peso del vehículo debe ser lo más reducido posible, en función del consumo de combustible, por la resistencia al rodamiento, y por las aceleraciones.
• La acción del conductor (área total de visión); se ve restringida debido a la seguridad que debe tener el automóvil (parantes y refuerzos) en su estructura en caso de accidente. (visibilidad reducida).
• Las formas exteriores, y las interiores; se deberán integrar en un conjunto equilibrado.

En cuanto a los diseñadores conocidos; algunos con sus empresas, las independientes, los institutos y las academias, están siempre trabajando en la creación de una carrocería estética, bella y aerodinámica.

En algunos casos con la ayuda del país mismo -como lo fue el caso de Italia en una época- cosa que ocurrió con el prestigioso Pininfarina, que pudo desarrollar modelos aerodinámicos por cuenta de una institución italiana, como lo era el Consejo Nacional de Investigaciones (CNR). todo esto tenía un objetivo, la construcción de un “Concept car”, de un prototipo estéticamente atractivo, con una importante habitabilidad, que ofreciera una resistencia mínima al aire, y que consumiera poco.

Pareciera que solo la apariencia, o el aspecto de un automóvil, no es decisivo para su éxito comercial.

Existieron oportunidades, en donde el consumidor rechaza de alguna manera, las innovaciones estilísticas muy audaces. La difusión de autos con líneas aerodinámicas, ha experimentado este tipo de actitud de rechazo.

Pero es de conocimiento, que en la actualidad la aerodinámica juega un papel muy importante, ya que existe la conciencia que la resistencia que ofrece el aire al avance de un vehículo, redunda en un consumo excesivo de combustible.

Los más grandes diseñadores dedican gran parte de su poder creativo, en lograr automóviles modernos, sobrios y equilibrados, que son expuestos luego en Salones Internacionales.

En la actualidad, se trata de reunir las leyes que rigen la aerodinámica hasta la fecha, la ciencia del aire que pasa alrededor de un cuerpo en movimiento, a través de procesos técnicos y siempre los más actualizados, para poner a punto un auto pero con una resistencia al aire teóricamente mínima.

Los valores de la resistencia al aire medidos, sobre las primeras maquetas construidas, siempre contienen una esperanza, aunque después no sean utilizadas para un vehículo real. No se trata solo de que el aire pase con el mínimo de resistencia posible, a lo largo de las partes laterales o flancos y del techo. Una parte de ese aire, pasa por debajo del automóvil, y producen un empuje ascendente, fuerza que se manifiesta bajo la forma de resistencia al rodamiento y que, en el caso de los aviones les permite levantar vuelo. En el caso de los autos, este empuje ascendente, no produce solo un consumo de energía, sino que además la estabilidad del automóvil, sobre todo con los vientos laterales.

Desde hace tiempo, esta característica es superada, con la ayuda de componentes o accesorios como los “Spoilers”, que reducen las corrientes de aire bajo el auto, y mejoran el flujo alrededor de la carrocería. Existen proyectos estudiados matemáticamente y por computadora, que no tienen una fuerza ascendente. En los autos de competición con gran potencia, se usan artificios aerodinámicos -como los “alerones”- que actúan contrariamente y crean una presión suplementaria sobre las ruedas, favoreciendo el aumento de la potencia de tracción.

Los trabajos realizados, que favorecieron a la cadena evolutiva de la aerodinámica, se remontan al año 1914. El primer paso científico, se efectuó a comienzos de la década del ’20, a través de Paul Jaray, un antiguo colaborador del conde Zeppelin, con su principio de dos perfiles de ala superpuestos. Algunos de los pioneros de la aerodinámica, como Karmm, Rumpler Everling, Claveau, Andreau, Beaumont y Revelli son solo conocidos por los historiadores. Cabe señalar que después de la Segunda Guerra Mundial, la industria automotriz toma un creciente interés en la aerodinámica, estudiando en profundidad sus teorías, y usando sus dispositivos y herramientas, como es el caso de los túneles de viento, y el instrumental de precisión necesario.

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Autor: Claudio Módena
Fuente: Taller Actual