GEA: Cómo cuidar la bomba de combustible eléctrica

El cuidado de la bomba de combustible eléctrica es fundamental para garantizar su vida útil. Por lo tanto, te recomendamos seguir los siguientes consejos:

Consejos para el cuidado de la bomba de combustible

1. Observar que el combustible del tanque no esté degradado

Cuando un auto permanece parado muchos meses y se utiliza con poca frecuencia o funciona con gas, sucede lo siguiente:

La nafta es una mezcla de productos derivados del petróleo (hidrocarburos), los cuales son volátiles. Con el tiempo y la temperatura, la nafta se va evaporando y se forma un residuo pastoso y pegajoso dentro del depósito que es difícil de eliminar.

Por lo tanto, su consistencia y olor pueden llegar a cambiar. También, va perdiendo sus propiedades, lo que podría obstruir la bomba de nafta, los filtros, el sistema de inyección y hasta el mismo depósito

La duración de la nafta depende de varios factores como el contacto del hidrocarburo con el oxígeno, la luz que recibe y la presencia de metales, polvo y humedad. Según cómo inciden estos factores, la nafta tiene una duración de entre tres a seis meses para funcionar sin inconvenientes.

Después de seis meses, es probable que la nafta genere mayor cantidad de residuos en el tanque. En el caso de que no se use en doce meses, es recomendable sacarla y cargar combustible nuevo.

2. Evitar cargar combustible contaminado o adulterado

Otro problema es que el combustible que se carga puede estar contaminado o adulterado. Por lo tanto, es importante aprender a reconocer un combustible degradado.

El conductor se puede dar cuenta de que la nafta es de mala calidad o está contaminada sobre la base de su rendimiento. Si el consumo es mayor y es necesario hacer más paradas de las habituales en una estación de servicio, probablemente haya sido adulterada.

Señales de que la nafta se encuentra en mal estado:

-Tirones del motor

-Pérdida de potencia al acelerar

-Luz testigo del motor se enciende a cada rato

-El motor se apaga repetidamente.

3. No dejar el tanque de combustible habitualmente vacío

Conducir con poco combustible, esperar a último momento para cargar el tanque y usar la reserva con frecuencia es riesgoso. La bomba puede sobrecalentarse y sufrir un desgaste prematuro o trabarse y quemarse por los siguientes motivos:

• La bomba de combustible se encuentra sumergida en el depósito y necesita un flujo constante de combustible para enfriarse.
• Con el tiempo, los sedimentos e impurezas del combustible se asientan en el fondo y pueden ser aspirados por la bomba obstruyendo los filtros.

En los autos con diésel el riesgo es mayor. Estos motores son más sensibles a las impurezas y al agua que se forma por condensación en el interior del depósito. Además, debido a la mayor densidad del diésel, es más fácil que los sedimentos obstruyan el filtro, lo que podría generar graves problemas en el sistema de inyección.

Recomendamos cargar combustible antes de que se encienda el indicador de reserva. Lo ideal es que el depósito esté al 20% de su capacidad total, lo que ayuda a mantener en buen estado la bomba y el filtro. Así, se prolonga la vida útil del sistema, evitando costosas reparaciones, sobre todo en los autos que funcionan alternativamente con gas y nafta.

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