El sistema de dirección actualizado

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El sistema de dirección actualizado
Bugatti Carlos ©



Es importante evaluar, cuanto ha evolucionado el sistema de dirección en los últimos tiempos. No hace existían automóviles que poseían sistemas de dirección complicados, pesados, insensibles, imposibles.

En la actualidad diríamos, y desde hace unos años, se están montando direcciones servoasistidas. Cabe recordar que los mismos fueron primero utilizados en Estados Unidos, y por muchos años fueron resistidos en Europa por ejemplo.



La evolución de la dirección de un auto es compleja, y tiene en cuenta observaciones estéticas y de funcionamiento.
Respecto a lo funcional, se tiene en cuenta en todas las condiciones de utilización lo siguiente:
- Baja y alta velocidad.
- Aceleración o frenado.
- Con suelo parejo o deteriorado.
- En recta o en curva.
- Con suelo seco o mojado.



Sin duda, actualmente, existe la necesidad de tener “facilidad” en la conducción, es decir que el denominado servo-dirección llega a equipar “a pedido” los autos pequeños con este sistema. En realidad se trata de un “amplificador” de la acción de los brazos del conductor, que se obtiene por medio de una bomba hidráulica accionada por el motor del auto.
Se estima que en un sistema con servo-dirección, el esfuerzo es atribuido al 30 por ciento a los brazos y al 70 por ciento a la parte hidráulica.

Si hablamos básicamente de facilitar la conducción, en especial en los autos de cierto peso, se necesita una asistencia o ayuda al sistema de dirección, para disminuir en parte, el esfuerzo necesario para accionar el volante de dirección, sobre todo con el vehículo parado o en baja velocidad.



Por mucho tiempo, el sistema tradicional de dirección asistida utilizaba una bomba hidráulica accionada por el motor térmico, que ejercía presión de cada extremo del dispositivo hidráulico de la dirección, por medio de válvulas movidas por la acción del volante.

Estos sistemas permiten normalmente, que a través del control de las válvulas disminuya el esfuerzo para accionar el volante, en lugar de hacer funcionar todo el sistema con mayor presión. Hoy en día los fabricantes especialistas, buscan lograr sistemas hidráulicos que sean más livianos, menos costosos y economicen energía, en especial cuando son montados en autos pequeños, por eso en la actualidad son preferidos los sistemas eléctricos o electro-hidráulicos. Aquí el sistema mantiene la asistencia hidráulica, pero la presión la provee una bomba eléctrica.

Otra variante es descartar los sistemas hidráulicos, y hacer que la parte asistida la efectúe un motor eléctrico. Su instalación es sencilla, pero se hace necesario un modulo de control y una serie de sensores.